Al parecer ahora es Apple quien está copiando las funciones de los teléfonos Samsung. Específicamente pareciera que Apple copió las funciones del Samsung Note 7, después de que un iPhone 7 explotó en tránsito hacia su dueño.

Según se difundió por el día de hoy por Reddit un usuario recibió este iPhone 7, que aparentemente explotó de camino. Cómo se puede apreciar en las fotografías, el teléfono llegó quemado y básicamente… deshecho.

La unidad fue vendida por AT&T, al abrirlo el usuario descubrió que su teléfono había experimentado una muerte prematura e inusual.

Según el mismo Reddit, esta tarde fue contactado el usuario por un representante de Apple, quién le prometió un reemplazo a la mayor brevedad posible del teléfono que explotó.

No está totalmente claro que fue lo que sucedió con el teléfono que lo hizo explotar. Por lo menos en este momento, este es el único incidente que se conoce donde un iPhone 7 explota. Por cuenta propia, por supuesto. No estamos contando los incidentes donde un iPhone explota a raíz que el usuario tiene la genial idea de meterlo al microondas para cargarlo, o de buscarle el conector de audífonos con un taladro.

A partir de las fotografías muchos usuarios están deduciendo que el teléfono sufrió un golpe bastante fuerte durante el transporte, que golpeó y deformó la batería. Las baterías de litio son sensibles a los golpes, cuando estos logran romper el sello que existe su interior. En ese momento la batería de litio se sobrecalienta y causa incendio o explosiones, cómo se puede ver en este vídeo de YouTube.

También hay usuarios que están cuestionando la autenticidad del teléfono, ya que dicen que hay detalles en las fotografías que podrían indicar que en realidad se trata de una copia del iPhone 7, que no fue fabricada por Apple. Aunque si el teléfono fue vendido por AT&T, es dudoso que pueda ser una copia.

El incidente ha despertado interés entre los usuarios de teléfonos celulares, después del recall que tuvo que hacer Samsung de los teléfonos Note 7. Varios millones de unidades tuvieron que ser devueltas a la fábrica y reemplazadas, después de que algunos Note 7 empezaran a explotar aleatoriamente, mientras estaban siendo usados o cargados. En ese caso, Samsung encontró que el problema era un protector de sobrecarga que iba defectuoso dentro del teléfono.