Nevil Maskelyne: primer WiFi troll de la historia

A menos que hayan estado viviendo bajo una roca, probablemente hayan oído hablar de grandes mentes que dieron origen a la era tecnológica moderna, como Thomas Edison, Nikola Tesla, Alexander Grahm Bell…

Pero muy pocos conocen a uno de los grandes de la historia, llamado Nevil Maskelyne. Qué hizo especial? Trollear. En 1903. Antes de que existiera cualquier vestigio de tecnología remotamente similar a Internet.

Y trolleó nada mas y nada menos que a Guillermo Marconi, padre de la radio.

Era una tarde de junio de 1903 en Londres. En el audiotorio del Royal Institution, John Ambrose Fleming (nada mas y nada menos que el inventor del diodo y el tubo al vacío) estaba preparando un aparato, para darle al público una demostración de la transmisión por radio. Fleming estaba en Londres, y a unos 500 Km estaba Marconi, quien transmitiría un mensaje hasta el auditorio para que todos presenciaran el milagro de la comunicación inalámbrica.

De repente, el aparato cobró vida, y empezó a sonar una transmisión en clave morse. Pero, extrañamente, no era el tan esperado y milagroso mensaje de Guillermo Marconi. Varios telegrafistas en el público rápidamente se dieron cuenta de que el mensaje era la palabra “RATAS”, repetida una y otra vez.

Unos minutos después, la transmisión se convirtió en poesía: un extraño poema insultando a Guillermo Marconi, y acusándolo de ser un fraude. El aparato siguió poseído por unos minutos más, tirando toda clase de cuestionamientos y mensajes crípticos, antes de quedarse en silencio.

Nadie se lo pudo explicar, en ese momento. Qué le había pasado a Marconi y su aparato?

Unos días después, se supo la verdad en un periódico local. El responsable de la transmisión había sido Nevil Maskelyne, un mago e inventor que se había interesado en los desarrollos de Marconi. Por su cuenta, había estado experimentando con ondas de radio a corta distancia. Pero de repente se vio en problemas, debido a que las patentes de Marconi eran tan amplias y generalistas que le prohibían mercadear cualquiera de sus inventos (qué familiar que suena). Maskelyne tenía el conocimiento, pero las patentes de Marconi no le permitían usarlo.

Alrededor de 1901, Guillermo Marconi anunció al mundo que había desarrollado la tecnología para transmistir mensajes en forma confidencial, sin que pudieran ser escuchados por otros. Empezó a vender su idea a la industria marítima. Aunque su tecnología, en realidad, no era más que un radio sintonizable. Marconi estaba suponiendo, incorrectamente, que nadie podría escuchar los mensajes porque nadie más tendría la capacidad de sintonizar un receptor en la misma frecuencia en donde él transmitía.

Maskelyne se dio cuenta de eso, y se fue con su descubrimiento donde las empresas de cables transatlánticos, a quienes la tecnología de Marconi las estaba llevando a la ruina. Por supuesto, financiaron su investigación, que culminó con el primer acto de wireless trolling de la historia, esa tarde de 1903.

No está totalmente confirmado, pero dicen que antes de quedar en silencio, del aparato salió un último mensaje que nadie entendió: “pwned”.