Hace unos días Aasterinian Hime hizo un post corto en ASCII Art, o en su caso, ASCII Conversion, que es convertir una foto a una representación gráfica en caracteres ASCII.

Y fue ahí que me di cuenta de algo más que las nuevas generaciones no conocen, y probablemente nunca conozan, que es toda la época del ASCII Art. Ahora todos lo ven como una curiosidad más: meta una foto en la paginita, y la paginita le tira de vuelta una representación en ASCII, a veces buena, a veces no tan buena.

Pero detrás de esa representación ASCII hay toda una historia no contada, que obviamente no me la sé completa, pero si me sé una parte que fue como de los 90’s para acá. Así que para contribuir a la cultura general…

Los dibujos en ASCII empezaron a aparecer hace muuuucho tiempo. De hecho el ASCII Art digital más viejo data de 1966. Pero antes de eso, inclusive, existieron dibujos hechos con letras y números empleando máquinas de escribir.

En los 80s el ASCII Art empezó a hacerse popular en las universidades. En aquél entonces resulta que se usaban sistemas centralizados, donde el usuario metía su programa, la computadora lo ejecutaba, y el resultado salía en una impresora comunal. Uno llegaba a las bibliotecas, escribía el código (si era lo suficientemente afortunado como para tener una terminal tonta donde escribir), y luego unas horas después tenía que pasar a la impresora a recoger la salida impresa.

Resulta que esos sistemas imprimían una cubierta para cada usuario, donde venía su nombre. El nombre se escribía en letras grandes empleando ASCII. Evidentemente en aquél entonces las impresoras con costos podían hacer letras, ni pensar una línea o menos un sombreado.

En esa época gente estudiantes universitarios con poco que hacer empezaron a propagar el arte ASCII, y se hizo famosa la tendencia. De hecho ahí aparece el recuerdo más viejo que tengo personalmente de un ASCII Art: 1988, en un disco floppy, de 128 Kb, publicado por la revista COMPUTE. Venían como 20 ASCII Arts de todos los temas habidos y por haber. Y uno feliz imprimiendo página tras página y pegando en las paredes. De hecho me encontré uno de los ASCII que venían en ese disco.

Pero la época dorada del ASCII Art fue cuando surgieron los sistemas BBS, que eran computadoras con un modem, conectadas permanentemente a una línea telefónica dedicada. Uno llamaba y podía intercambiar correo electrónico, archivos, chatear, y hacer un poco de varas más. En Costa Rica fue como en los 90s que aparecieron, y fue ahí donde en ticolandia empezó a generarse ASCII Art.

Qué tiene que ver uno con el otro? Resulta que los modem de los 90s daban una velocidad como de una treintava parte de la velocidad del ADSL más triste que actualmente ofrece el ICE. Bajando 15 KB uno perfectamente podía durar un minuto o más. Además las computadoras lo que tenían era a lo sumo 1 MB de RAM y unos 20 o 30 MB de disco duro. O sea, ni pensar en crear gráficos de 30 Kb para el logotipo y la interface del sistema. Había que trabajar a puro texto ASCII, o si uno era medio fino, ASCII extendido. Ahí fue donde alguna gente aprendió a dibujar en ASCII.

Y no, en aquél entonces no existían programitas convertidores a ASCII. La conversión y el dibujo era a puro pulso, por lo menos acá en CR. Habían ciertos programas que le ayudaban a uno a dibujar para no tener que estar tecleando Alt-NNN, pero hasta ahí.

Empezó a hacerse competencia entre los BBS, tanto del mundo como de Costa Rica, por hacer ASCII Art cada vez mas impresionante. Y conforme fue aumentando la velocidad de los modem, el art se fue haciendo más complejo y elaborado.

Finalmente como en 1996 empezó la historia conocida. Vinieron las computadoras de mayor capacidad, los ambientes totalmente gráficos, y el ASCII Art empezó a quedar obsoleto. Finalmente a finales de los 90 llegó a Costa Rica Internet, y los BBS empezaron a morir y con ellos los artistas ASCII aspirantes. Finalmente desaparecieron, y solo en Estados Unidos quedaron algunos aficionados al tema, que hoy día siguen produciendo.